La isla Floreana sufrió un daño ecológico significativo debido a especies invasoras introducidas por colonizadores. El Proyecto de Restauración Ecológica busca recuperar su biodiversidad eliminando roedores y gatos, reintroduciendo 12 especies endémicas y restaurando hábitats. Combina ciencia y participación comunitaria para asegurar la recuperación del ecosistema y promover medios de vida sostenibles para sus habitantes.

Nuestro Equipo
Rakan Zahawi
Director Ejecutivo y CEO
Birgit Fessl
Investigadora Principal- Conservación de Aves Terrestres
Heinke Jäger
Investigadora principal - Restauración de bosques de Scalesia, Especies Invasoras Terrestres
Patricia Jaramillo Díaz
Investigadora Principal - Galápagos Verde 2050
Instituciones colaboradoras
Parque Nacional Galápagos
Agencia de Bioseguridad de Galápagos
Fundación Jocotoco
Island Conservation
Durrell Wildlife Conservation Trust
Para ver la lista completa de instituciones colaboradoras, por favor visita el sitio web del proyecto.
Donantes
Para ver la lista completa de donantes, por favor visita el sitio web del proyecto.
El reto
Floreana es una de las pocas islas del archipiélago de las Galápagos con su propia fuente de agua dulce de fácil acceso. Sus abundantes recursos la convirtieron en una de las primeras islas colonizadas , atrayendo a piratas, balleneros y otros marinos que la utilizaban como escala para reabastecerse. Este contacto temprano con el ser humano provocó importantes daños ecológicos, ya que se introdujeron especies invasoras -como ganado, cabras, burros y ratas- que se proliferaron sin control. Mientras tanto, las tortugas endémicas de la isla se convirtieron en una fuente ideal de carne fresca, capaz de sobrevivir a bordo de los barcos durante meses en largas travesías, lo que las llevo a su extinción. Con el tiempo, Floreana se convirtió en una de las islas más comprometidas ecológicamente de Galápagos, con especies invasoras que desplazaron a la fauna nativa y endémica, y degradaron gravemente los hábitats críticos.


Objetivo del programa
Hace más de una década, se puso en marcha el Proyecto de Restauración Ecológica de Floreana para restaurar la salud ecológica de la isla Floreana mediante un enfoque holístico. Esta iniciativa se centra en tres acciones fundamentales: (1) eliminar la fauna invasora -incluidas dos especies de roedores y gatos ferales-; (2) restaurar los hábitats nativos; y (3) reintroducir doce especies animales clave extirpadas de la isla.
Integrando estrategias científicas con la participación activa de la comunidad, el proyecto busca restablecer el equilibrio ecológico de la isla y mejorar los medios de vida de los 150 habitantes de Floreana, promoviendo actividades productivas compatibles con la conservación y que beneficien tanto a la población como a su biodiversidad única.
Una iniciativa interinstitucional
Una iniciativa de tal envergadura y complejidad sólo puede lograrse mediante una profunda colaboración. Por eso el proyecto está liderado por la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG) y la Agencia de Bioseguridad de Galápagos (ABG), con la FCD, la Fundación Jocotoco y Island Conservation como co-ejecutores, cada una aportando su especialidad. Durrell Wildlife Conservation Trust, referente en reintroducción de especies, es también un socio clave. Muchas más organizaciones participan y seguirán participando, enriqueciendo el proyecto con su experiencia única. Para más información, visite:
Qué hacemos
Como co-ejecutor, la FCD aporta sus conocimientos científicos y su experiencia en las Islas Galápagos para dirigir los esfuerzos de restauración del hábitat a gran escala del proyecto. También está contribuyendo en aspectos clave de la reintroducción de especies y el monitoreo a largo plazo tanto de flora como de fauna, en particular de las aves. Aquí un panorama más detallado de lo que estamos haciendo:
Restaurar el hábitat degradado en toda la isla es la clave para asegurar el éxito a largo plazo de la Restauración Ecológica de Floreana. Con esta acción, buscamos debilitar la capacidad de plantas invasoras como la mora (Rubus niveus) y la guayaba (Psidium guajava) para volver a dominar amplias zonas, mientras fortalecemos la resistencia natural frente a futuras perturbaciones, como el cambio climático o la introducción de nuevas especies. Implementar una estrategia a escala de isla exige planificación y tiempo considerables, pero resulta esencial para que el programa tenga éxito. Estimamos que 1.170hectáreas de hábitat húmedo —incluida el área antes dominada por Scalesia, y 54 hectáreas de bosque seco necesitan ser restaurados.
Para apoyar estos esfuerzos, la FCD gestiona el único vivero forestal de Floreana, produciendo anualmente miles de plántulas y recolectando semillas para su futura propagación. Al mismo tiempo trabajamos con la comunidad local para generar conciencia e involucrarla en los esfuerzos de restauración.

Nuestro equipo de conservación de aves terrestres apoya activamente a la DPNG en la preparación de la reintroducción de varias especies de aves. Un ejemplo clave es el pequeño pájaro brujo, una de las 10 especies de aves que se prevé reintroducir en Floreana. La reintroducción de una especie exige planificar e investigar meticulosamente para maximizar sus posibilidades de restablecerse con éxito a su hábitat histórico. Nuestros investigadores realizan análisis genéticos para seleccionar a los mejores individuos para la reintroducción, diseñan protocolos de transporte seguros y eficaces entre islas y evalúan tecnologías de monitoreo innovadoras, como transmisores ultraligeros. También evalúan el momento, la ubicación y las condiciones de hábitat óptimos para garantizar el éxito de la reintroducción. Y luego combaten amenazas específicas, como las infestaciones de mosca vampiro aviar, instalando dispensadores de autofumigación en zonas clave de anidación para aumentar las probabilidades de supervivencia. Con estos preparativos, elaboramos planes detallados que entregamos a la DPNG, ofreciendo estrategias científicamente sólidas para devolver estas especies a sus antiguas áreas de distribución.

Medir el impacto de nuestro trabajo es clave para saber qué funciona y ajustar nuestras acciones. Por eso, nuestros investigadores realizan un seguimiento ecológico continuo para evaluar la idoneidad del hábitat, la recuperación del ecosistema y la respuesta de las especies a las intervenciones de conservación.
- Estudiamos periódicamente la vegetación en parcelas permanentes, desde las zonas costeras hasta las tierras altas, para evaluar la salud de los ecosistemas antes y después de eliminar roedores y gatos invasores.
- Monitorizamos sistemáticamente los invertebrados para obtener datos de referencia sobre la calidad del hábitat y la disponibilidad de alimento, esenciales para las especies reintroducidas.
- Seguimos de cerca las poblaciones de aves tras las medidas de control de especies invasoras, lo que nos permite detectar cambios y adaptar nuestras estrategias de conservación.
Estos exhaustivos trabajos de monitoreo aportan información esencial sobre la dinámica ecológica y sirven de base para las estrategias de gestión de la conservación alargo plazo.

Por qué es importante
Un enfoque holístico de restauración refuerza la resiliencia ecológica, recupera la función de los ecosistemas y mejora la salud general del medio ambiente. La isla Floreana es una de las más degradadas de Galápagos y ha perdido su equilibrio natural, desencadenando un efecto dominó. Por ejemplo, las tortugas gigantes —ingenieras esenciales del ecosistema— han estado ausentes durante décadas. Sin ellas, la bioturbación del suelo y la dispersión de semillas han cambiado drásticamente. Aunque especies introducidas como el ganado feral asumieron parcialmente esta función, terminaron causando más daños. Los hábitats nativos se degradaron, las aves endémicas compiten con animales invasores por recursos limitados y plantas agresivas como la mora han desplazado especies nativas e incluso perjudicado la agricultura local.
Restaurar Floreana es urgente y esencial. Al recuperar su salud ecológica, beneficiamos tanto a la fauna como a su pequeña comunidad humana. Más allá de la isla, el éxito del proyecto puede servir como modelo para restaurar otras islas afectadas del archipiélago y demostrar al mundo que la restauración de ecosistemas a gran escala no solo es posible, sino vital para el futuro del planeta.
Nuestro impacto
Preparando la reintroducción del Cucuve de Floreana:
Como preparación para el restablecimiento del Cucuve de Floreana, sembramos 577 plantas de ocho especies endémicas dentro de un corredor ecológico de 2,5 hectáreas. Para garantizar un suministro de agua sostenible para estas plantas, así como para las plantas del vivero, instalamos dos tanques de 2500 litros con techos colectores de lluvia. También establecimos cuatro jardines ecológicos comunitarios con especies nativas y endémicas, incluido el corredor del "Refugio del Cucuve", con el fin de fomentar la participación local en los esfuerzos activos de restauración del hábitat.
Preparación de la reintroducción del pequeño pájaro brujo
Para apoyar la reintroducción de esta ave endémica en Floreana, probamos transmisores ultraligeros (0,16 g) en seis individuos en Isabela. Los transmisores no tuvieron ningún impacto en el vuelo, el movimiento o la búsqueda de alimento, lo que confirma su idoneidad para los esfuerzos de reintroducción. Además, las aves fueron mantenidas en cautiverio hasta 13 horas para simular el transporte entre islas, y no mostraron signos de estrés o problemas de salud. Basándose en estos resultados, los investigadores de la FCD están elaborando un plan de reintroducción detallado para la DPNG, con el fin de orientar los próximos pasos en la restauración de esta especie en su antigua área de distribución. Antes de la reintroducción del ave en Floreana, nuestros investigadores realizarán una prueba de reintroducción del pequeño pájaro brujo en la Isla Santa Fe, un paso clave que ayudará a informar sobre la reintroducción en Floreana a medida que aprendamos de esta experiencia.
Evaluación de la idoneidad del hábitat para la reintroducción de especies
Nuestros ecologistas de restauración han supervisado los cambios en el hábitat antes y después del control de roedores y gatos invasores, obteniendo información clave sobre la idoneidad del hábitat para la reintroducción de 12 especies localmente extintas en Floreana. Los estudios de vegetación realizados en 24 parcelas permanentes, desde la costa hasta la parte alta, confirmaron que las tierras altas húmedas soportan la cubierta vegetal más densa, dominada por la endémica Scalesia pedunculata (24%), pero fuertemente invadida por la mora (Rubus niveus) (37%). Por el contrario, las zonas más secas y de transición presentaban una menor cobertura vegetal, pero servían de baluartes para especies nativas y endémicas, lo que pone de relieve la resistencia de estos ecosistemas.
Nuestros esfuerzos de seguimiento de invertebrados de 2022 a 2024, realizados durante las estaciones cálidas y frías en zonas agrícolas y protegidas, también proporcionaron una línea de base para la calidad del hábitat y la disponibilidad de alimentos para especies como el pequeño pájaro brujo. Se registraron los principales órdenes de insectos esenciales para la dieta de las aves (dípteros, hemípteros, arácnidos, lepidópteros y coleópteros), pero la elevada presencia de dos especies de hormigas rojas invasoras sigue siendo preocupante. En particular, las poblaciones de caracoles terrestres -un grupo indicador clave de la salud del suelo- aumentaron de 61 individuos en 2022 a 883 en 2024 en ocho lugares de estudio que cubrían una superficie total estudiada de 800 m2. Este aumento puede estar relacionado con los esfuerzos de erradicación de roedores o con las condiciones de El Niño. El seguimiento anual continuo ayudará a identificar las causas a largo plazo de este cambio ecológico.
Seguimiento de las poblaciones de aves tras el control de las especies invasoras
Después de los esfuerzos de control de especies invasoras realizados a finales de 2023, monitoreamos 223 puntos en Floreana para evaluar el impacto en las poblaciones de aves. Como se esperaba, el número de pinzones terrestres disminuyó, probablemente debido a su dependencia de las áreas de alimentación en el suelo donde se colocaron los cebos. Sin embargo, las poblaciones de otras especies endémicas, incluido el pinzón mediano, en peligro crítico, se mantuvieron estables, lo que indica un resultado positivo para los esfuerzos de conservación.
Autofumigación para combatir la mosca vampiro aviar
Para seguir apoyando a las poblaciones de aves tras la campaña de erradicación, los investigadores de la FCD colocaron 90 dispensadores de autofumigación con material para nidos tratado con insecticida en zonas clave de anidación en Floreana. Este método ayuda a controlar las infestaciones de mosca vampiro aviar, reduciendo la mortalidad de polluelos de especies de aves amenazadas.
Mantenimiento del único vivero forestal de la isla
Para apoyar nuestros esfuerzos de restauración del hábitat, en 2024 se produjeron 1019 plántulas en el único vivero forestal de la isla, gestionado por la FCD. Las especies clave fueron Bursera graveolens, Scalesia pedunculata, Opuntia megasperma, Croton scouleri, Vachellia macracantha y Lecocarpus pinnatifidus. Además, se recogieron y almacenaron 860 semillas de siete especies para su futura propagación.

Por qué deberías apoyarnos
La isla Floreana ha perdido gran parte de su biodiversidad única debido a las especies invasoras y a la degradación del hábitat. La recuperación a largo plazo de este ecosistema crítico depende de estrategias de restauración con base científica y de la reintroducción eficaz de especies. Al apoyar nuestro proyecto, puedes ayudar a la FCD a restaurar hábitats esenciales para la vida silvestre nativa, restablecer especies de aves perdidas y monitorear la salud del ecosistema. Además, si tiene éxito, esta importante iniciativa puede servir de modelo para la intervención y restauración de otras islas más grandes y complejas del archipiélago.
Razones concretas para apoyar nuestro programa:
- Apoyar una de las iniciativas de restauración holística más ambiciosas del mundo, un proyecto que, de tener éxito, podría servir de modelo para otras islas de Galápagos y demás.
- Restaurar hábitats críticos plantando vegetación nativa y manteniendo el único vivero forestal de la isla.
- Apoyar la cuidadosa reintroducción de especies clave de aves endémicas, como el Cucuve de Floreana y el Pequeño Pájaro Brujo.
- Proporcionar un seguimiento científico esencial para seguir la recuperación del ecosistema y mejorar las estrategias de conservación.
- Garantizar un futuro sostenible para la biodiversidad única de Floreana, beneficiando tanto a la fauna como a la comunidad local.

Protege Galápagos, Impacta al Mundo
El impacto que generas en este pequeño ecosistema de enorme biodiversidad es parte de una huella más grande que estás dejando para el futuro del mundo. Al realizar una donación, te invitamos a unirte a nosotros en nuestra misión de proteger uno de los tesoros naturales más importantes de nuestro planeta a través de la ciencia y acciones de conservación. Gracias por generar un impacto con nosotros.